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| Legislatura: 1882-1883 (Cortes de 1881 a 1884) |
| Sesión: 9 de marzo de 1883 |
| Cámara: Congreso de los Diputados |
| Discurso / Réplica: Discurso |
| Número y páginas del Diario de Sesiones: 62, 1355 |
| Tema: Declarando incompatible el cargo de Diputado a Cortes con todo sueldo, cesantía, pensión o comisión retribuida que perciba de fondos del Estado |
El Sr. Presidente del CONSEJO DE MINISTROS (Sagasta): Pido la palabra.
El Sr. VICEPRESIDENTE (Ruiz Capdepón): La tiene V. S.
El Sr. Presidente del CONSEJO DE MINISTROS (Sagasta): Y hace muy bien el Sr. Silvela en no decir más, porque me obligaría a mí a hacer afirmaciones que tampoco me parece a mí conveniente hacer mientras S. S. no me obligue a ello.
Por lo demás, debo advertirle una cosa. Lo que S. S. llama indiferencia olímpica mía, consiste en la libertad de acción que dejo a mis amigos, y que creo deben tener los Diputados; los límites de eso que S. S. llama indiferencia, llegan únicamente hasta donde no pueda aquella libertad afectar a las cuestiones de gobierno; pero fuera de eso, mis amigos tienen toda la libertad que pueden y deben tener. Pues si no fuera así, ¿de qué les serviría la iniciativa parlamentaria que la Constitución les concede? ¿No quiere S. S. que la tengan en nada? Pues pueden tenerla, y hacen bien en usarla en todas las cuestiones que no afectan al Gobierno; y como de eso es juez el Gobierno , cuando diga a los Diputados de la mayoría: "a cambio de la libertad que por otra parte gozáis, hasta aquí ha llegado vuestra iniciativa, " tendrá la esperanza de contar con sus amigos y de que estén a su lado con gusto; porque de otra manera, si en todas las ocasiones exige a sus amigos que no tengan iniciativa, llegarán a cansarse del sacrificio, y harán bien, y yo quiero, no sólo que no se cansen del Gobierno sus amigos, sino que ni siquiera se cansen sus adversarios. (Bien, muy bien.)